Los niños y las niñas se paran frente a un TV y deciden cuál programa ver y cuál no. Por eso, quienes producimos los contenidos infantiles tenemos que pensar en estrategias que hagan posible que ese niño o niña escoja nuestro programa y no otro.
La publicidad es una técnica destinada a difundir o informar al público sobre un bien o servicio a través de los medios de comunicación (televisión, cine, radio, revistas, internet) con el objetivo de motivar al público hacia una determinada acción de consumo. (www.definicionabc.com)
Las estrategias de publicidad han evolucionado y también los consumidores. Antes los consumidores compraban productos, después beneficios y hoy experiencias.
Hay dos escenarios en las estrategias de publicidad: en uno se utilizan los medios de comunicación para informar sobre el beneficio de un producto y prometerlo. En el otro, se generan experiencias para que el consumidor compruebe los beneficios que le están prometiendo.
Es necesario desarrollar procesos creativos y estratégicos que promuevan la aceptación de un producto o un programa. Para eso, es clave contar con información sobre el producto, el grupo objetivo y los beneficios que se ofrecen.
La definición de los escenarios más adecuados para contactar a los usuarios, consumidores, o televidentes y entregarles la información que nos interesa, surge en gran medida, de la investigación previa que se realiza.
El resultado del proceso creativo y estratégico es una actividad o un juego en el que el niño tiene la posibilidad de conocer de primera mano el producto, el programa, los beneficios, los protagonistas o lo servicios que se le ofrecen, memorizarlos y generar o reforzar un vínculo afectivo con él.
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