Este documental muestra la lucha de los familiares de cautivos que no existen en las listas de secuestrados de Colombia. Estas personas recorren el país en una caravana motorizada con el ánimo de sacar a los rehenes del anonimato y clamar solidaridad de un pueblo acostumbrado a noticias de secuestro. Pero esta travesía da un giro inesperado cuando los protagonistas de este capítulo sufren una gran pérdida. En plena carretera, los familiares se enteran de que las FARC acaban de fusilar a cuatro uniformados que llevaban hasta 13 años cautivos en la selva. Inmediatamente se derrumban los ánimos de las familias de los sacrificados y el temor se apodera de quienes los acompañan. Los protagonistas no saben si cancelar la misión o continuar luchando por el reconocimiento de los demás cautivos.