... Sin torres rimbombantes y con arcos sólo en los quicios de las puertas, el barrio París ubicado en la comuna 1 del municipio de Bello, es por así decirlo, la antítesis de los preceptos que rodean a la ciudad Luz Francesa. Sin embargo pasando ya de la forma al fondo, los 2 lugares homónimos ubicados en extremos opuestos del mundo, conservan estrechas similitudes en cuanto a desarrollo artístico se refiere; claro está es bueno guardar las proporciones. En repetidas ocasiones el mundo ha puesto sus ojos en Medellín, un próspero vértice de la geografía colombiana observado con asombro por los escabrosos sucesos que la señalan como una de las ciudades más violentas del planeta. A 10 kilómetros de Medellín, se encuentra el barrio París, ubicado en la comuna 1 del municipio de Bello. En esa zona el conflicto armado urbano ha dejado miles de imágenes para una galería de dolor y malestar. En medio del fuego cruzado entre bandas, guerrillas y autodefensas, la población civil aparece como principal víctima. Los jóvenes de este barrio crecen en medio del estigma de un lugar donde abundan las prohibiciones y el fantasma de la muerte. La violencia barrial desatada por la delincuencia común y el paramilitarismo, junto con el desequilibrio intrafamiliar, implican una permanente presión que dificulta el libre desarrollo de su personalidad. Allí donde la expresión sin presión pareciera algo utópico, se ha venido expandiendo un proceso de paz y convivencia a través del teatro.