Taller de la Memoria

Tiene como eje de trabajo el “retrato documental” desde un acercamiento unipersonal. A través de la “entrevista”, los cinéticos participantes en el proceso se relacionan con personajes cargados de historia y cercanos a ellos con el objetivo de traer los recuerdos y la memoria a un presente compartido.

Busca profundizar en la memoria a través de la “luz y la fotografía”. Los cinéticos descubren que la mirada de cada uno interpreta de una forma única lo que ve y que, mientras más se observa, lo observado se transforma.

El énfasis en esta fase está en el “sonido” que es fundamental en un relato audiovisual. Los cinéticos exploran y escuchan paisajes sonoros y entienden la importancia que para la memoria tiene el hecho de darle voz a los seres humanos, naturaleza u objetos ya que todos tienen algo que decir, incluso el silencio.

Los cinéticos reconocen su región y la narran: sus personajes, su geografía, lo ocurrido y lo que hay que hacer para proteger y hacer realidad los sueños compartidos por quienes la habitan siempre en diálogo con la “producción” que de manera organizada y consciente permite concretar las creaciones audiovisuales.

Los cinéticos exploraron en las fases precedentes la memoria personal y colectiva y en esta fase realizan documentales que intentan abordar la memoria histórica con la ayuda del montaje, una técnica que ordena narrativamente el relato y le da potencia plástica y expresiva.

Una vez que los cinéticos han relatado desde recuerdos familiares hasta complejas situaciones de la memoria histórica se convierten en creadores de contenidos por lo que es momento de narrar libremente.